lunes, 18 de noviembre de 2013

Buscando mi rumbo en la Oscuridad

Hoja sin Fecha



Observaba en el rostro de aquellas personas la atracción que les provocaba su dulce voz,estaban hipnotizados con cada nota que salía de su garganta,se convirtieron en mariposas volando libres por cada rincón del pub,en ese instante sus mentes desconectaron de las cosas mundanas de la vida y se dedicaron a conectar sensorialmente con la música. Lastima que yo me hallará allí,insensible hacia aquel sonido que cierto tiempo atrás hacia volar mi imaginación. Estaba aquí sentado,abstrayendome de este sonido celestial,observando como su efecto transforma mi alrededor,en mi sólo queda esta fría copa de vodka que se va ahogando a medida que el hielo se deshace,hasta ella puede sentirse modificada esta fría noche. Decido dar un último trago antes de marcharme,acto seguido recojo mi abrigo y me marcho de aquel lugar.

Me encuentro ahora en la calle,me pareció mas fría que de costumbre,mas angosta y mas desierta de vida. Guio mis pasos hasta mi apartamento,sólo debo cruzar la avenida Watson y ya me encontrare con la pálida fachada de mi apartamento.Quizás allí me sienta vivo.
Atravesando la avenida Watson comenzó a llover. Note cada gota resbalando sobre mi cuerpo,al menos su humedad me hizo ver que aun puedo sentir algo.
Al fin llegué a mi apartamento,allí estaba frente a mí la pálida fachada. Mi bloque era un andrajoso edificio de cuatro plantas,cuyo exterior se conservaba en condiciones deplorables,vivo reflejo de las personas q habitábamos el interior. Una vez en casa,me sentí seguro,podía esconder mi vacío,desaparecer de la vida pública,no ser escrutado por la gente.

Decidí acostarme. Entre en mi oscura habitación,me tumbe en mi gran y deshecha cama,cerré los ojos con el afán de soñar aquello que falta en mi vida,escuché entonces las gotas de lluvia chocando suavemente contra mi ventana,puse mi atención en aquel sonido y vino entonces Morfeo a visitarme llevándome a su palacio del letargo.
Los rayos de luz entran por un hilito de mi persiana incidiendo en mis cerrados parpados,abro los ojos ante ese fogonazo y tanteo con la mano la mesilla,palpo el despertador,lo agarro con fuerza y miro la hora. Las 12:00,es tarde pienso,pero, ¿Acaso tengo algo q hacer?,mi vida no es mas que las manijas del reloj avanzando hasta acabar el día,podría dormirme para siempre y nadie echaría de menos mi existencia. Comoo diría Antoine Roquentin: - Sé que existo,pero es lo único que tengo,no tengo historias que contar,me limito a existir-.Pobre Roquentin que vida mas cruel trazo el maquiavelico Sartre.

Sí fuera católico creería que esta angustia ha sido infligida por Dios,cosa que mi razón rechaza con violencia,pero me temo que nadie mas que yo es culpable de esto,yo soy libre de elegir lo que soy y lo que hago,lastima que haya desperdiciado mi vida todos estos años y ahora me sea imposible remendarla. Vuelvo a cerrar mis ojos,quiero desaparecer.

Despierto de nuevo,observo mi alrededor intentando dilucidar en que hora me encuentro,hallo a mi alrededor una luz grisácea y lúgubre,supongo que será por la tarde,confirmo mis sospechas al mirar el despertador,las 18:00,¡Vaya!, mi cuerpo aunque joven, cae derrumbado ante la pesambre de mi mente,el poder de mi mente me sorprende y a su vez me entristece. Marchito mi cuerpo joven durmiendo,debería ejercitarlo;moverlo;ponerlo a prueba;hacerlo sentir útil;que disfrute de su vigor antes de que caiga en decadencia tras los años.

Pero, por desgracia mi mente ejerce una férrea dictadura sobre mi cuerpo. Pobre Platón,vería en mi ser,que erraba en su antropología,no es el alma la que esta encerrada en mi cuerpo,sino al revés,es mi alma, la que encierra mi cuerpo,la priva de sus quehaceres diarios. Intento evadirme de mis angustias y para ello recurro a recordar sí he logrado soñar y sí ha sido así,intento recordar lo soñado. Mi cerebro busca en su memoria como un becario de oficina y...¡Eureka! Consigo reconstruir mi sueño,ello me produce una fugaz alegría,veo que algo dentro de mi lucha por ser feliz,no se ha rendido ante la adversidad,recuerdo mi sueño.



Me encontraba en un extenso prado verde rebosante de vida,repleto de majestuosos árboles de anaranjadas hojas y una suave brisa primaveral acariciaba mi piel. Andaba despreocupado por aquel paisaje,cuando de pronto aparecía ante mi una joven muchacha de etéreos rasgos,no recuerdo con exactitud su rostro,sólo logro acordarme de su cabello rojizo,ardiendo y ondeándose al viento como el plumaje de un fénix,también recuerdo su tez pálida y su largo vestido blanco con infinidad de jirones,era la viva imagen de una Nereida. Se acercaba con suma alegría y al estar frente a mi acariciaba mi rostro. Su dulce tacto erizaba mi vello y me sumergía en el mas intenso placer conocido,pero,aún mas dulce era su voz,Pues al abrir su boca sonaba una voz celestial dijo: - Roberto,ven conmigo,olvidalo todo-.En ese sólo instante mi sueño me hizo feliz,me sentí vivo,realizado. Ojalá mi vida fuese un sueño,desearía abrir mi puerta y encontrar tras ella la joven dama rojiza,oír nuevamente su voz y caminar a su lado hacia rumbo desconocido,lastima que me encuentro despierto observando la pesadilla de mi realidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario